Naty Álvarez nació con una malformación congénita; una amputación del miembro superior. A pesar de su condición, toca diferentes instrumentos como la guitarra, cajón, órgano, entre otros.
A sus 50 años, Naty Álvarez ha demostrado que no hay nada imposible. A pesar de su discapacidad, ella ha cumplido sus sueños, dejando en claro que la frase “No se puede” no existe.
Con casi una década enseñando música y danza en el CERPS Callao, esta maestra se sigue emocionando cada vez que ve avances en sus alumnos. Como parte de una loable labor, Álvarez contó por qué decidió enseñar a personas con discapacidad.
“Anteriormente había trabajado con personas con discapacidad y me encantó la idea de venir al CERPS. Siempre me pone feliz ver los progresos de los chicos”, comentó la docente.
“Decidí ser profesora cuando una psicóloga del colegio donde trabajé se me acercó y me dijo que un niño solo quería hablar conmigo porque tenía una discapacidad y se sentía identificado. A pesar de mis siete dedos, yo toco guitarra, el órgano y violín. Siempre para adelante. Demostrar que sí se puede, sea la discapacidad que se tenga, si tienes que esforzarte el doble, hazlo. Aquí, en el CERPS, tengo chicos con los que he trabajado hace tiempo y ahora los veo cantando, tocando y para mí es una cosa grande” añadió Álvarez, quien tiene alumnos desde infantes hasta adultos mayores.
La maestra de música contó que en su niñez lidió con prejuicios a causa de su condición. Sin embargo, ella aseguró que tuvo un buen respaldo para enfrentar las dificultades de la vida.
“Estudié en un colegio para personas con discapacidad física y eso me ayudó para superar todo. También estudié música en el Conservatorio de Lima y ahí tenía que demostrar que los profesores sí me podían enseñar. Me ha pasado que ven mis manos y no quieren enseñarme más”, recordó.
Además, Naty Álvarez se siente orgullosa de su actual trabajo porque no solo inspira a sus alumnos, sino a los padres que asisten a los talleres para acompañar a sus hijos.
Actualmente, en los diferentes talleres del CERPS- Callao participan 820 usuarios. En cuanto al taller de música y danza, la maestra enseña alrededor de 90 alumnos.