16.1 C
Lima
sábado, septiembre 28, 2024
InicioMundoBruno de Ayala Bellido / Ganó la derecha en Europa, pero …

Bruno de Ayala Bellido / Ganó la derecha en Europa, pero …

Date:

Historias en tendencia

Por Berit Knudsen / Abusos y ausencia de derechos humanos en Oriente Medio

Por Berit Knudsen Un Proyecto de Ley en Irak busca...
spot_imgspot_img

BRUNO DE AYALA BELLIDO 

Nunca se imaginó el rey Pirro de Epiro que luego de la batalla de Heraclea (280 a.C.) su nombre sería utilizado para describir el hecho de ganar algo que al final sirve para muy poco. A esto se le llama Victoria Pírrica.

Las elecciones al Parlamento Europeo llevadas a cabo el último 9 de junio demostraron varias verdades: el crecimiento de la nueva derecha o derecha patriótica que está a favor de la Unión Europea, pero que a su vez exige cambios.

Entre otras cosas, la denuncia del nefasto “pacto verde” que está arruinando el agro y la ganadería en el viejo continente, mayor control a la desquiciante inmigración africana y del islam, una mayor independencia de los estados para la toma de decisiones de Bruselas (capital de la Unión Europea) y sus disparates social progresistas. Esta nueva derecha hace una cerrada defensa de la vida, la tradición, la familia, las fronteras seguras y la cristiandad.

En números, la suma de todos los votos de la derecha europea es mayor que la de la izquierda, que incluye socialistas, izquierda ultra, la “religión” ecologista verde y el progresismo zombi. Sin embargo, la centro derecha (derechita cobarde) infectada de globalismo y filo progresismo, siempre temerosa, pacta como costumbre con la izquierda socialista, se convierte en gobierno y hace imposible los cambios que la mayoría reclama.

La actual presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen (socialcristiana), es una digna representante de esta derecha, así como Núñez Feijoo del Partido Popular de España. Todo lo contrario, ocurre con Giorgia Meloni de Fratelli d’Italia, Santiago Abascal de Vox España, André Ventura del partido político Chega de Portugal, y Geert Wilders del Partido de la Libertad en Holanda, entre otros, que sí están por una Europa unida, pero con cambios.

El efecto de estas elecciones se hace sentir muy fuerte en países como Francia, donde un representante de centro derecha funcional al globalismo como Emmanuel Macron se ha visto obligado a disolver la Asamblea Nacional y convocar elecciones.

Todas las boletas de triunfo se las lleva Marine Le Pen, una anti-Europa (otra vertiente de la derecha) que en su plataforma electoral propone la expulsión de los migrantes musulmanes. Duro trabajo le espera; hay distritos completos en París, por ejemplo, dominados por el islam y su ley, la Sharía, como en los países nórdicos. Esta situación es poco difundida por la prensa internacional, pero el mundo multicultural falló.

Fue una Victoria Pírrica, pero victoria, al fin y al cabo. Aunque la centro derecha les dé la espalda a sus electores y pacte para ser gobierno con la izquierda socialista, vamos a tener que esperar para desterrar esa lacra llamada progresismo y ver recuperar a Europa su libertad.

Mientras tanto, seguiremos viendo al social progresismo y su versión más renovada, el globalismo, bramando y defendiendo el terrorismo internacional, fomentando el aborto, inculcando la ideología de género y el feminismo disparatado, fomentando la lucha fútil entre el hombre y la mujer. Pese a ello, estos resultados dan esperanza. El futuro está virando a la derecha, a la razón. Ojalá el tiempo nos alcance.

(*) Analista internacional

Suscríbete

- Obtenga acceso completo a nuestro contenido premium

- No te pierdas nunca una historia con notificaciones activas

- Accede a informes y análisis de expertos.

Últimas noticias

spot_img