21.1 C
Lima
domingo, abril 13, 2025
InicioColumnistasPor Antero Flores-Araoz / Populismo y realismo

Por Antero Flores-Araoz / Populismo y realismo

Date:

Historias en tendencia

Luis De Stefano Beltrán, PhD () y Ernesto Bustamante, PhD (*) / Hambre y Dogma

Luis De Stefano Beltrán, PhD (*) y Ernesto Bustamante,...
spot_imgspot_img

Por Antero Flores-Araoz

Es una pena, pero nos estamos acostumbrando a que cuando existan graves problemas en nuestro país ellos se quieran solucionar con medidas populistas, que por supuesto van en contrasentido de las soluciones realistas.

Las pretendidas soluciones populistas son evidentemente muy efectistas, pues hay personas o que no piensan o que piensan mal y se creen que el remedio populista propuesto es efectivo, cuando no hay forma que lo sea. Muchísimo mejor es el realismo para no generar falsas expectativas ni ilusiones.

Ejemplos nos sobra, pero nos referiremos a algunos de las semanas precedentes. Como ha aumentado la delincuencia, la criminalidad organizada, las extorsiones, el sicariato y los homicidios, nuestras más altas autoridades quieren solucionarlo con la pena de muerte, que es un tema recurrente desde mucho tiempo atrás y, que siempre se ha dejado de lado por irreal.

Con cargo a referirnos en extenso sobre dicha pena en un futuro cercano, solo nos constreñiremos a recordar que la pena de muerte está limitada según el artículo 140 de la Constitución para el delito de traición a la patria en caso de guerra y al terrorismo, aunque para esto último hay carencia de norma que desarrolle el precepto. Entonces si se quiere ampliar la pena mortal para otros delitos, tendrá que hacerse un cambio constitucional parcial, que requiere en el Congreso votación calificada.

Además, no se puede ampliar la citada pena para otros delitos que los que ya están establecidos, por expreso mandato de la Convención Americana de Derechos Humanos, la que tendríamos que denunciar con tal propósito.

A mayor abundamiento, las penas son castigo por la perpetración de delito, pero además tiene función rehabilitadora y socializadora de los reos y, evidentemente a un muerto no se le puede ni rehabilitar ni resocializar.

Se nos habla como solución ante el crecimiento de la delincuencia, de instaurar el servicio militar y policial obligatorio, hoy voluntario, pero se olvida que según cálculos aproximados habría cada año no menos de doscientas mil personas aptas para el servicio militar, pero el problema es que no hay cuarteles suficientes donde albergarlos ni tampoco instructores en número adecuado y, sin perjuicio del costo presupuestal.

Hablan también de una “sala de guerra” donde se reunirán los altos mandos gubernamentales, militares y policiales, para fijar las estrategias y tácticas para combatir la inseguridad ciudadana.  Entérense, con otro nombre existe desde hace muchísimo tiempo y son los “Estado Mayor” del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, del Ejército, de la Marina, de la Fuerza Aérea y de la Policía Nacional.

Para las sanciones administrativas la “ingeniosa” solución de nuestras autoridades es la elevación de multas, aunque olvidan que ello solo fomenta más informalidad, lo que también es aplicable a los delitos, habiéndose hecho más modificaciones de aumento de penas en el Código Penal, que artículos iniciales tenía el mismo. Simplemente ello no es disuasivo.

El facilismo populista lleva a proponer la reapertura de los penales del Sepa y del Frontón, pero la ingenuidad hace olvidar que en el Sepa no había controles suficientes por estar en plena selva y en el Frontón sucede algo peor, que es la logística muy onerosa, pues hay que llevar agua, alimentos, medicinas y un larguísimo etcétera.

En el Congreso no se quedan atrás, la cantidad de universidades que se crean ya es elevada, sumamente onerosa y probablemente sin conseguir ni alumnos ni profesores y que solo servirán para inflar el ego de los congresistas que formularon la protesta. 

Incluso, para enfrentar el crecimiento de la delincuencia, la salida fue exactamente la salida, por censura, del Ministro del Interior, lo que estamos convencidos será un borrón y cuenta nueva y a comenzar de nuevo se ha dicho.

¡No prosigo, para no enfermar mi hígado!

Suscríbete

- Obtenga acceso completo a nuestro contenido premium

- No te pierdas nunca una historia con notificaciones activas

- Accede a informes y análisis de expertos.

Últimas noticias

spot_img