Ricardo Sánchez Serra
A través de su liderazgo al frente de la misión diplomática en Guatemala, el embajador de Japón, Tsuyoshi Yamamoto -hoy cumpliendo igual misión en el Perú- permitió reforzar el diálogo político de alto nivel y ampliar los vínculos económicos y de cooperación que contribuyeron a fortalecer la amistad entre nuestros pueblos. impulsó programas para el desarrollo del país, entre los que destacan programas para la educación, proyectos de cooperación e inversión, proyectos para el desarrollo económico y tecnológico, organizó visitas de alto nivel a Guatemala, así como apoyó en mejorar la infraestructura de escuelas a nivel regional, por lo que resulta procedente honrar sus méritos y destacada trayectoria, señaló el embajador de Guatemala, Carlos Escobedo Menéndez, al leer los considerandos de la condecoración e imponer la distinción “Antonio José de Irrisarri” en el grado de gran oficial, al embajador Yamamoto.
El evento se realizó en su flamante y bella residencia frente al mar de Miraflores, ante la presencia del ministro de Justicia, Eduardo Melchor, funcionarios de la Cancillería y de la Embajada de Japón, autoridades ediles y otros invitados especiales.
“El embajador Yamamoto dejó en Guatemala una profunda huella y muchos afectos… La Orden de Irrisari ha sido entregada a jefes de Estado, cancilleres y embajadores. Reconoce -como en este caso- a aquellas personas o entidades que se hayan distinguido en relaciones internacionales o contribuido a la lucha por la independencia y la soberanía de los pueblos”, mencionó Escobedo, quien luego resaltó la figura de Antonio José de Irrisarri, militar, político, diplomático y escritor guatemalteco.
El diplomático guatemalteco destacó que Japón, hoy por hoy, es considerado un país promotor de la paz, contribuyendo a la estabilidad en la región de Asia-Pacífico y en la comunidad internacional. ha proporcionado cooperación a los países en desarrollo basándose en el principio de la seguridad humana.
“Es un país dispuesto a defender valores universales como la libertad, la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho; a defender con determinación el territorio, las aguas territoriales y el espacio aéreo, así como para afrontar los retos globales como el desarme nuclear y la no proliferación y el cambio climático”, aseveró Escobedo, quien luego se refirió a las estrechas relaciones de su país con la nación asiática.
Por su parte, el embajador Yamamoto, agradeció el gran honor de recibir la condecoración que no solo se le concedió por sus logros y esfuerzos personales, sino por las grandes relaciones de todo nivel entre sus países.
Realzó a las empresas líderes de su país, como Marubeni, Itochu y Sumitomo por sus negocios en Guatemala y de dos empresas manufactureras que abrieron con éxito fábricas en ese país. Elogió, asimismo, a Jica por haber contribuido al desarrollo socioeconómico de la nación centroamericana y su gestión en el campo de los desastres naturales.
“Durante mi estancia en Guatemala -informó el embajador Yamamoto- también hubo un activo intercambio en los ámbitos cultural y académico. En el Perú, muchas universidades e investigadores japoneses han participado activamente en la excavación, investigación y conservación del patrimonio arqueológico, incluidas las Líneas de Nasca…en Guatemala un equipo de la Universidad de Kanazawa…ha estado contribuyendo… a la excavación y preservación del complejo de Tikal…qe fue declarado Patrimonio Mundial de Unesco…”
“Podría mencionar -agregó- muchos recuerdos de Guatemala, pero lo que más agradezco es la interacción con la gente que conocí…, que siempre nos ayudaron a mí y a mi mujer a hacer fructífero nuestro trabajo y nuestra vida privada…”
(*) Premio mundial de periodismo “Visión Honesta 2023”
