Según el excanciller peruano Luis Gonzales Posada, la crisis en Venezuela ha puesto al descubierto a una serie de organismos burocráticos, inoperativos, insensibles, que se “muestran silentes ante los actos de barbarie que comete el gobierno de Maduro no solo a través del gigantesco fraude electoral, sino de sistemáticos asesinatos, torturas y encarcelamiento de opositores”.
– ¿A qué organismos se refiere?
En primer término, al Parlamento Andino, integrado por 25 legisladores representantes de Perú, Chile, Ecuador, Colombia y Bolivia. Ese bloque ha debido organizar una sesión extraordinaria en Caracas para expresar su solidaridad con la democracia, pero no lo han hecho.
– ¿Han dado alguna razón?
Razón no, pretexto sí, porque aducen que no les permitieron acreditarse como observadores electorales. Es un argumento débil porque sólo autorizaron hacerlo al Centro Carter, que se retiró denunciando el fraude y asegurando que había ganado el candidato opositor, Edmundo González Urrutia, con 67% de los votos, frente al 30% de Maduro; una diferencia de más de 4 millones. Ahora estamos en otra etapa y es necesaria su presencia en Venezuela, y si no los dejan ingresar habrán demostrado al mundo la barbarie del régimen.
– ¿Qué otros organismos no actúan?
Tenemos la propensión de crear instituciones internacionales, seguramente con buena intención, pero que después se convierten en entes burocráticos. Así se constituyeron los parlamentos Latinoamericano; Amazónico; Indígena, de Unasur, Centroamericano, Mercosur y Sudamericano. Todos tienen como primer principio “la defensa del sistema democrático”, pero, como vemos en la crisis venezolana, se mantienen callados. Lo que quiero decir, es que existe un enjambre de organismos que son solo de membrete, ectoplasmáticos. Todo está tan distorsionado que, por ejemplo, el Parlamento Latinoamericano lo preside el diputado cubano Rolando González, un aliado del chavismo. No necesito mayores comentarios.
– Usted sostuvo en una oportunidad que esa misma displicencia la encontramos en los bloques internacionales de partidos políticos…
La Internacional Socialista es un claro ejemplo. Es una organización que se encuentra completamente burocratizada, agónica; son un cascarón de lo que fueron inicialmente. Funcionan en Londres y solo sabemos de ellos cuando gana las elecciones algún presidente amigo y van a celebrar a su país. Después, desaparecen. Son incapaces de movilizarse en apoyo a la democracia. Peor aún, callan frente a situaciones graves como las que suceden en Venezuela, Cuba, Bolivia y Nicaragua. Un triste final para una institución política que debió tener un mejor destino.
– ¿Qué solución avizora en la crisis venezolana?
Maduro sigue matando y arrestando opositores. Reconoce que las fuerzas de seguridad han detenido a 2 mil 200 personas, a quienes acusan de terroristas, pero la oposición dice que por lo menos son el doble, en su mayoría jóvenes y de barrios populares. Están pintando con una cruz la casa de disidentes para que la policía política, el tristemente célebre Sebin, los identifique y luego aprese, como hicieron los nazis con las casas de los judíos. Hay 26 personas asesinadas, pero esas cifras continuarán incrementándose lamentablemente.
– Maduro, sin embargo, cuenta con apoyo del exterior…
Así es. Los grupos comunistas lo respaldan, como sucede en nuestro país, donde un grupo de parlamentarios de Perú Libre viajó invitado a Caracas en condición de observadores. Una vergüenza porque viajaron solo para decir a su retorno a Lima que las elecciones habían sido ejemplares, limpias, barbaridad que no sostiene nadie. Ese es el nivel al que llega el sectarismo.
– Pero hay varios países que también respaldan a Maduro.
Así es. En el hemisferio, tienen el apoyo de las dictaduras de Cuba, Nicaragua y Bolivia, además de Honduras. Pero su mayor respaldo son de potencias extracontinentales que los blindan diplomáticamente, otorgan créditos, armamento y realizan inversiones. Me refiero a Rusia, China, Irán y Corea del Norte. Lo que sorprende es que lo hagan abierta e impunemente, porque ni siquiera la OEA se atreve a denunciar ese pacto y los Estados Unidos miran por la ventana y de reojo. Además, cuentan con el respaldo de mercenarios como el ex presidente del Gobierno de España, Rodríguez Zapatero.
– ¿Podrá dejar el gobierno Maduro?
Maduro se aferra al poder porque cuando lo deje irá preso. Tiene miles de asesinatos, arrestos y torturas denunciados por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, por la OEA, la Comunidad Europea y la misma Corte Penal Internacional. Asimismo, debe rendir cuenta de los miles de millones de euros que han robado y que se estiman en 300 mil millones. Por esas dos consideraciones se defenderán a sangre y fuego.
– ¿Cuál es su apreciación de los Estados Unidos en esta crisis?
Han abandonado su hemisferio y han sido superados ampliamente por Rusia y China a nivel político, de inversiones y comercio. Su mensaje es débil, casi inaudible, poco claro.