César Gallo Lale
Todo esto es parte de una estrategia orquestada por los Comunistas y Caviares y ahora más que nunca que ya la Presidente Dina Boluarte convocó a elecciones generales para el 2026, después de nombrar como Ministro del Interior a Julio Diaz Zuloeta quien se desempeñaba como Ministro de Seguridad Pública, para reemplazar al Ministro Juan José Santivañez. Es decir, según aseveró el Ministro saliente solo se estaba cediendo la posta en el cargo y todo seguirá igual en el manejo de la cartera del MINTER y la defensa de la Seguridad Ciudadana en el país ¿Qué esperamos de esto?
Nos preguntamos entonces, como se enfrentará la nueva crisis migratoria que se avecina en el sur del país, especialmente entre Madre de Dios, Cusco, Puno, Moquegua y Tacna, donde Evo Morales piensa todavía en la creación de una nueva República Aymara, por sus lazos étnicos, similitud de vida y donde las posibilidades de un éxodo siempre están latentes, debido a la situación precaria de Bolivia y sobre todo si la acción del Estado Peruano por esas zonas, es débil en la satisfacción de todas las demandas básicas para subsistir dentro de lo que debería ser legal, como recibir buena atención de salud, existencia de trabajo, vivienda y seguridad etc; y por el contrario priman los delitos de narcotráfico, minería ilegal, contrabando de productos e intercambio de dólares y soles, que ahora es la moneda en que los bolivianos se refugian ante la ausencia de dólares, facilitando además para ellos el intercambio comercial.
Como sabemos, la situación de Bolivia actualmente es precaria en todo sentido, no hay Dólares para la importación de combustibles y medicinas, elementos esenciales para el normal desarrollo y producción. La nacionalización de las minas y el gas que Evo Morales y Luis Arce instauraron, dieron efímera prosperidad al pueblo boliviano, sumado al estatismo derrochador del socialismo, terminó con los medios de subsistencia de Bolivia, se contrajo la producción en todo sentido, y se arrasó con el buen estilo de vida, incluso varias aerolíneas ya han cancelado sus vuelos a este país, pues su costo/beneficio es adverso.
Como vemos, el Socialismo del Siglo XXI con todas sus promesas, fue solo ilusorio y temporal sin resultados a futuro, todo lo contrario, no hay proyección positiva en el tiempo que dé esperanza de cambio e inversiones en ese país. Solo tienen recursos de subsistencia, aquellos que están en la producción y comercialización de narcotráfico y minería ilegal, que también obtienen de territorio peruano.
¿Nos preguntamos entonces? Que va hacer el Perú para contrarrestar esta peligrosa situación que puede agravar y convulsionar la estabilidad política y social, sobre todo ad-portas de las elecciones generales del 2026 y con una galopante inseguridad ciudadana que afecta cada día más a la sociedad peruana que exige cambios inmediatos de políticas y sobre todo ante un Sistema Judicial infiltrado por comunistas y caviares cómplices que avalan la criminalidad existente en el país.
Confiaremos en las inmediatas acciones que realicen el ejecutivo, el legislativo y en el nuevo ministro del interior, para controlar esta inminente invasión.
¡Estamos advertidos!
¡Elecciones libres! ¡Comunismo y terrorismo nunca más en el Perú!
(*) Teniente General FAP en retiro