César Gallo Lale
El 07 de Junio se conmemoró un aniversario más de La Batalla de Arica y se renueva el Juramento a nuestra Bandera, donde las Fuerzas Armadas todos los años juran ante Dios y la Patria “Defenderla hasta dar la vida por ella si fuera necesario”, los comunistas y caviares que vienen promoviendo la inseguridad ciudadana, la destrucción del sistema judicial y el caos generalizado en nuestra patria, que ha devenido en una ingobernabilidad jamás vista en el país, deben estar pensando bien que pueden hacer ahora, ya que las FFAA hoy más que nunca se mantienen todavía incólumes en defensa de la democracia guardando una vigilancia estricta y un silencio que condena todas las irregularidades que vive el Perú, sin perder su esencia como entidades tutelares de la nación.
Por eso, en este día tan especial hay que rendir los honores correspondientes a todos los miembros de nuestras FFAA y PNP que derrotaron a la subversión comunista de los años 80 y 90 de los grupos terroristas de Sendero Luminoso y Tupac Amaru, cuyos remanentes ahora coludidos con la izquierda caviar, terrorismo, narcotráfico, bandas criminales nacionales y extranjeras, minería ilegal, algunas ONGs y entidades supranacionales como la OEA, ONU, CIDH entre otros, con una estrategia blanca, quieren aún destruir a nuestras fuerzas del orden que representan un estorbo para sus intereses si no se coluden con ellos y defienden la ideología del Comunismo del siglo XXI, sus intereses totalitarios y lo que promueven en la agenda 2030 del nuevo orden mundial.
Así, los conceptos fundamentales de Dios, Patria y familia, pilares de toda sociedad organizada con valores morales y educación férrea a través de la familia y centros educativos en todos los niveles, vienen siendo amenazados por la acción e infiltración comunista en todos los estamentos del estado con la finalidad de socavar y envenenar la mente de la niñez y juventud de las diferentes generaciones que son el futuro del Perú, todo esto aunado a la acción de las bandas criminales que actúan en todos los campos y crean zozobra y miedo en toda la sociedad peruana.
Sin embargo, sin tener una política actual, clara y contundente por parte del ejecutivo como en los años 90, las FFAA y PNP con profunda y viril tradición de sus instituciones, se mantienen luchando ante las nuevas amenazas descritas que azotan al país, aún sin el apoyo jurídico, escaso equipamiento, sin canon económico alguno para suplir sus necesidades, bajos sueldos de su personal etc. Esto demuestra la vocación de estas nobles entidades de servir a la patria y al pueblo peruano aún a costa de sus propias vidas.
La Presidente Dina Boluarte, como Jefe Supremo de las FFAA y PNP, después de leer este artículo, debería de emitir una política clara, precisa y contundente para que las fuerzas del orden actúen con la firmeza requerida y se acabe de una vez con la inseguridad ciudadana, brindarles todo el apoyo descrito respecto a sus necesidades y así se encuentren preparados, entrenados y equipados para cumplir su misión especificada en la constitución respecto a la defensa interna y externa del territorio nacional.
Después de todo ella se mantiene hasta ahora en el poder, gracias al apoyo y garantía que le brindan las Fuerzas Armadas y Policía Nacional.
(*) Teniente general FAP en retiro
